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POLVOS DE MAQUILLAJE, ¿CUÁL ES EL MÁS ADECUADO?

Los polvos de maquillaje jamás pueden faltar en nuestro neceser, ya que ayudan a sellar y darle una mejor terminación a nuestro maquillaje. Y es que, los polvos de maquillaje, son los mejores aliados para fijar nuestra base, corrector e iluminador y conseguir un efecto más duradero en el tiempo.

Pero existen varios tipos y, para que no tengas ninguna duda de cuál es el qué más te conviene, a continuación, te explicamos el efecto que logra cada uno en la piel.

POLVOS TRASLÚCIDOS

Este tipo de polvos aportan una terminación sutil y tenue, mejorando la apariencia e igualando el color de todo el rostro. Además, no alteran nuestro color, sino que corrigen el tono de la piel, por lo que pueden usarse en múltiples tonalidades siempre y cuando elijamos el tono adecuado.

Nuestra recomendación: elegir un tono un punto más oscuro que el de nuestra piel. De este modo, conseguiremos un efecto más natural y no cometeremos el error de otorgar a nuestra tez un tono demasiado pálido.

Este tipo de polvos fijan, sellan y matifican el rostro eliminando los brillos producidos por la grasa natural de la piel. Por eso, siempre tenemos que dejarlos para el último momento, una vez que ya hemos aplicado el resto de productos.

Un consejo: si tus días son largos y con muchas horas, puedes llevarte tus polvos en el bolso e ir dando pequeños retoques a lo largo de la jornada.




POLVOS COMPACTOS

Estos polvos aportan una gran cobertura (más que los polvos sueltos), además de aportar color a la piel. Por ello, si mantenemos una piel muy cuidada y hidratada, podremos usar los polvos compactos sin necesidad de utilizar una base previamente.

Si por el contrario preferimos no prescindir de nuestra base, podemos optar por aplicar los polvos con una brocha en la zona de la T. De este modo, evitaremosrecargar nuestro rostro aplicándolos por toda la piel y conseguiremos disimular las imperfecciones de una manera más natural.

Un consejo: si tu piel es mixta o grasa, prueba a aplicar los polvos solo en la zona de la T.



POLVOS SUELTOS

Estos polvos de textura ultra ligera, también conocidos como ‘libres’, sellan el maquillaje poniendo un punto final muy profesional a nuestro look.

Para su aplicación, lo mejor es optar por una brocha gruesa y suave, donde aplicaremos una pequeña cantidad de producto. Posteriormente, retiraremos el exceso de maquillaje con la palma de la mano y lo aplicaremos sobre el rostro con ligeros toques.

Un consejo: aplica la cantidad de polvos justa, ¡mejor pecar de menos que de más!